¿General del Ring o soldado raso?

La credibilidad de Gunther ha sido puesta en cuestión desde que perdió el título Intercontinental en Wrestlemania 40 contra Sami Zayn. Hay quienes consideran que Sami no era el indicado para acabar con su reinado, otros dicen que el problema no era Sami, sino cómo perdió el título, otros afirman que el problema viene de cómo ha sido manejado como main eventer y los más fatalistas sentencian que nunca podrá recuperar la credibilidad tras rendirse contra Jey Uso en Wrestlemania 41.

Todo lo concerniente al General del Ring es más amplio que un par de detalles y demasiado complejo como para simplificarlo tanto. Tampoco creo que esto trate de si está siendo mejor o peor manejado que cuando era campeón intercontinental o durante su legendario reinado como campeón de NXT-UK. Sencillamente, es no se puede manejar igual a un luchador en un territorio de desarrollo o con un título midcard que a un auténtico estelarista.

Las deficiencias de Gunther

En Gunther vemos a un luchador atípico. Al principio no parecía ser capaz de dar una promo sólida, pero tenía a Imperium al lado, sobre todo a Ludwig Kaiser, que podían hacer las promos por él. Esto, como un midcarder imponente, podía servir, porque no estaba sometido a una gran presión ni a historias imponentes.

Sin embargo, cuando Imperium se disolvió y no sabíamos si Kaiser seguía al lado del General del Ring o iba a seguir un camino propio, sus carencias en cuanto a promos comenzaron a hacerse notorias. Fue criticado por no ser solvente con el micrófono, pero vimos cómo pronto acalló las críticas y demostró que podía hacerlo.

Luego el problema era su personaje; pasó de ser un campeón imponente, casi invencible, a un luchador inseguro y cobarde que necesitaba recurrir a las trampas para ganar, algo que jamás formó parte de su personaje. Desde entonces, los críticos de Gunther se dividieron en los que atribuían estas deficiencias a un mal manejo y los que echaron en falta un periodo de transición entre su etapa midcard y main event.

A mí me habría gustado ver una rivalidad de transición contra un main eventer consolidado para darle credibilidad; pues, como decíamos, no es lo mismo ser un campeón de media cartelera que defiende el título contra luchadores a los que todos podemos ver perder que medirse a luchadores establecidos a los que hay que proteger. Es obvio que Gunther no podía verse igual de fuerte y dominante en este caso.

Sí, todo esto tiene muchos matices, muchos grises que convierten este tema en un debate muy interesante. Y con todo esto sobre la mesa es necesario que nos hagamos la pregunta que de verdad importa: ¿está hecho realmente Gunther para el main event?

Gunther es un general atípico

Empecemos por el personaje; Gunther está hecho para ser heel, es un luchador austriaco con una indumentaria bélica que se hace llamar el General del Ring y que WWE tuvo que ajustar su nombre por la controversia que hubo por llamarse igual que un general de las SS. Creo que hacen falta pocas explicaciones. No obstante, el público lo ama; tiene que hacerlo, porque es excelente, pero lo es a su manera.

Su presencia es imponente; tiene el aspecto de ser una auténtica bestia, se habló de que estaba destinado a luchar contra el mismo Brock Lesnar, sin embargo, no tiene un físico tan cuidado y trabajado como tal. Su personaje y su entrada al ring reflejan elegancia, pero sus gestos cuando lucha no es lo que trasmiten.

¿Y qué decir de su estilo de lucha? Es metódico y técnico; al mismo tiempo, sus movimientos se ven tan casuales y descuidados que no parece que le importe demasiado cómo luce. Sin embargo, siempre es una garantía de buen wrestling. Su psicología en los combates es extraordinaria y es tan versátil que puede acabar sus luchas por cuenta o sumisión; con una bomba o una plancha; con una dormilona, una llave de brazo o un cangrejo. Jamás se puede decir que no hay una narrativa que nos cuente sus combates de principio a fin, porque siempre la hay y siempre hay lógica en todo lo que hace.

Es bueno, muy bueno en el ring, y la gente lo sabe. Por eso su manejo siempre tiene que recordarnos que es el malo de la historia, si no lo hiciera, caeríamos en el error de aceptar a Gunther como otro face dominante y nos estaríamos perdiendo todos los matices que nos aporta el General del Ring. Para ello tiene que ser despiadado, pero toda moneda tiene dos caras, y así como esta es la cara, también nos toca enfrentarnos a la cruz.

Siendo heel tiene que confrontar a los héroes, los buenos de la historia que también tienen que estar envueltos en la narrativa adecuada: perder de forma injusta y demostrar a los fans que merecen las oportunidades que les han quitado, que ellos podían ganar, pero les han arrebatado la victoria. Gunther hace lo suyo para que esto suceda y para ello hace lucir a sus oponentes como realmente fuertes, a quienes para ganar tiene que emplear estrategias, a veces sucias.

Este es el contraste que no gusta a muchos fans, se mostró débil e inseguro ante Damian Priest, cuando este era uno de los hombres fuertes de la compañía en ese momento. Le tocó enfrentarse a Cody Rhodes en un duelo de campeones, donde la cara de la compañía no podía salir mal parado. Tuvo que defender su campeonato mundial contra Jey Uso en pleno apogeo del yeet.

Gunther es excelente, pero no perfecto

Que su situación actual tenga una explicación no significa que haya que excusarlo todo. Como decía, tiene muchos dejes que podría pulir, como lo hizo con sus promos. Su estilo sería mucho más vistoso si aplicara sus movimientos de forma más depurada. Y, ojo, no caigamos en el error, no aplica mal sus movimientos; se ven creíbles y son seguros para sus oponentes, me refiero únicamente a la estética.

Sí, se enfrentó a Jey Uso y el equipo creativo, Triple H como booker o los productores del combate decidieron que tenía que rendirse ante el hombre del yeet con una de sus propias técnicas, poco podía hacer contra esa decisión. Pero tardó tan poco en rendirse que se vio demasiado débil. Sí, quienes afirman que fue enterrado por Jey Uso tienen parte de razón; siendo un luchador dominante con experiencia en las técnicas de rendición debería haber aguantado más, generar tensión hasta haber sucumbido ante Jey, como lo hizo Pat McAfee, que ni siquiera es luchador.

Gunther es muy bueno y merece la posición que se le ha dado. No está enterrado, ni mucho menos; tiene treinta y siete años y está en un buen lugar, ya es dos veces campeón mundial y ha retirado a Goldberg; se rumorea que retirará también a Cena. Por supuesto que se confía en él. Pero su proyección sugiere más que lo que muestra; con todo lo que hemos visto de él, nos ha demostrado que es apto para el main event, pero parece que tiene algún que otro deje propio de midcarders de los que debería desprenderse si quiere brillar como se supone que debe de hacerlo alguien a quien llaman el General del Ring.

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